TEXTO y FOTOS: SAMANTHA CASTRO
Con el objetivo de abrir nuevos diálogos sobre el relacionamiento con la naturaleza y la vida en el planeta Tierra desde una perspectiva de género, el Centro Cultural de España en Guatemala (CCE) inauguró el pasado 3 de agosto, la exposición “Del arte, la naturaleza y las mujeres: miradas ecofeministas desde Guatemala”.
A partir de un recorrido que data desde finales del siglo XIX hasta la actualidad, la exposición recoge el trabajo de 18 artistas que nacieron o radicaron en el país. A través de sus obras, ellas se dirigen hacia las diversas formas de relacionarse con el medio ambiente y la vida de las mujeres dentro de una realidad ecocida, colonial, patriarcal y capitalista. Por este motivo, la presentación se sitúa conceptualmente dentro del ecofeminismo.
La exposición estuvo a cargo de Rosina Cazali, curadora e investigadora guatemalteca, quien realizó una revisión histórica sobre cómo las artistas se han acercado a la naturaleza y cómo la cuentan, la perciben desde su propia historia.
El día de la inauguración, la directora del CCE, Eva Bañuelos Trigo, mencionó acerca del trabajo realizado por Cazali en pensar sobre la interdependencia entre las mujeres y su entorno natural, en tal sentido que la exposición aborda la producción estética, política y social que surge de los distintos contextos de cada artista. Por otro lado, Cazali enfatiza en que “la exposición no solo permite profundizar en el tema que las reúne, sino que también deslumbra lo que sucede a nivel del arte contemporáneo del país”.
El evento inició con un conversatorio entre Rosina Cazali y Paula Nicho, artista maya kaqchikel, originaria de Comalapa y una de las artistas participantes de la exposición. Durante el diálogo, Nicho abordó sobre su relación con la naturaleza y su territorio, así como también trabajar las artes visuales siendo mujer maya.
Historia del arte en Guatemala: la invisibilidad del arte indígena
La exposición dio inicio con una acción de Marilyn Boror Bor, artista maya kaqchikel originaria de San Juan Sacatepéquez. La obra es una reproducción del mural Tierra fértil (1954) de la artista Rina Lazo, que fue cubierta con pintura acrílica blanca y lijada por la artista, en compañía de Susana Alvarado, Nanci Sinto y Belinda Chá. La pieza se titula Historia del arte en Guatemala (2024).
Foto: Samantha Castro. De derecha a izquierda, Belinda Chá, Susana Alvarado, Nanci Sinto y Marilyn Boror Bor, lijan la obra Historia del arte en Guatemala.
Rina Lazo Wasem fue una pintora y muralista guatemalteca formada en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado «La Esmeralda» en el Instituto Nacional de Bellas Artes de México. En sus obras, Lazo hacía referencia a la cultura de los pueblos originarios de Mesoamérica. Muestra de ello, se encuentra Tierra fértil que es el único mural que la artista realizó en Guatemala.
La pieza toma como tema central la vegetación del país, así como la fertilidad de la tierra por medio de la representación de mujeres. Sobre esto, Boror decidió desplegar el mural y analizarlo, ya que percibía una carga racista y romantizada de la vida indígena y su trabajo con la naturaleza y la tierra. “Los pueblos originarios han sido históricamente los guardianes del conocimiento y del territorio, concebido como un ser vivo. En el caso de Guatemala, no se puede considerar este concepto sin tener en cuenta la herencia maya. Actualmente, muchos presos políticos, en su mayoría indígenas, están defendiendo el territorio. Esto subraya que no se puede pensar en la ecología y el feminismo alejados de la ancestralidad maya”, enfatiza Boror.
La obra fue encargada para decorar el comedor del Club Italiano; sin embargo, fue cubierto con pintura blanca durante un período de remozamiento del club. Su recuperación estuvo a cargo de Lazo, en conjunto con el Programa de Conservación y Restauración del Instituto de Antropología e Historia de Guatemala, terminando el proceso en 1989. Actualmente, el mural se encuentra en el Museo de la Universidad de San Carlos (MUSAC).
Para Boror, el trayecto de la pieza de Lazo representa la realidad artística en Guatemala, donde los espacios y las colecciones de arte han sido exclusivos para hombres y luego para mujeres blancas. Por otro lado, la artista comenta que el arte de los pueblos indígenas es recientemente añadido en los libros como «arte naïf» -corriente artística caracterizada por la simplicidad y aparente ingenuidad técnica- o «artesanía». Es decir, que es descrito fuera de la categoría de arte al nivel del arte académico occidental. Por este motivo, remarca que Historia del arte en Guatemala es un acto que evidencia lo que significa ser indígena en los espacios del arte.
Según su autoría, la pieza se convirtió en una metáfora sobre la fragilidad de la memoria histórica y cultural, así como el constante intento de borrar la identidad y alcances de las culturas ancestrales por parte de fuerzas coloniales y modernizadoras.
“Esta exposición invita a un diálogo sobre la igualdad, la justicia y la supervivencia, vinculando la lucha de las mujeres con la protección de la Tierra. El ecofeminismo destaca la necesidad de un cambio de paradigma, en el que se respete tanto a la naturaleza como a las mujeres, valorando su papel fundamental en la sostenibilidad y en la preservación de la vida”, finaliza Boror.
Últimos detalles
Del arte, la naturaleza y las mujeres: miradas ecofeministas desde Guatemala estará disponible del 3 de agosto al 2 de noviembre de este año, en la sede del CCE en la zona 1 de la ciudad capital.
Las artistas que integran la muestra son: Alejandra Hidalgo, Ana Werren, Andrea Monroy, Camila Fernández Juarez, Carmen Lind Pettersen, Caroline Salvin, Cecilia Porras Sáenz, Inés Verdugo, Jamie Denburg Habie, Lourdes de la Riva, Margarita Azurdia, Marie Noëlle Fontan, Marilyn Boror Bor, Mena Guerrero, Olga Reiche, Paula Nicho, Regina José Galindo y Sandra Monterroso.
El espacio forma parte del proyecto curatorial de la Red de Centros Culturales de España en Latinoamérica y Guinea Ecuatorial de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). De este esfuerzo, se tiene programado llevar a cabo más de 10 muestras de arte en los distintos territorios en los que la institución se encuentra.